Volvimos
de nuevo a hacer maletas, a empacar nuestros sueños y nuestras rebeldías,
nuestros descontentos y nuestras propuestas. Con este equipaje llegamos a
Mesitas, Cundinamarca, el pasado 25 de enero, para dar inicio a nuestra IX
Asamblea General. Durante tres días, los
trece colectivos que construimos poder popular desde la Red Libertaria Popular
Mateo Kramer nos encontramos en pleno para analizar y discutir sobre lo que
viene ocurriendo en el país y para construir nuestras posiciones como jóvenes
de cara al tan importante reto que tiene hoy el pueblo colombiano de construir
una paz con justicia social.
El país
atraviesa por una crisis social, política y económica que se viene prolongando
por más de 50 años y con ella, la necesidad de activar mecanismos de
participación política, que realmente encausen las expectativas de las mayorías
por una vida digna, es hoy más urgente que nunca. En un estado de hostilidad
permanente en el que las condiciones de vida son cada día más precarias e
inestables y en donde la movilización y participación social están cada vez más
reprimidas y estigmatizadas, la juventud ha venido asumiendo un papel activo en
la construcción de una nueva sociedad.
La
situación de la juventud en América Latina, y las contradicciones que sobre
ella recaen en un país como Colombia debido al conflicto social y armado, han
reactivado las demandas y a puestas como sector en medio de la guerra mediática
y de la violenta ofensiva que lleva a cabo la fuerza pública y el
paramilitarismo tanto en el campo como en la ciudad. De ahí el permanente
caminar hacia la unidad, hacia la articulación y hacia la construcción conjunta
de un país en el que todas las voces, incluso las de aquellos y aquellas que
hoy no nos acompañan, hagan eco en todos los barrios, localidades, municipios y
ciudades del país, como condición necesaria para construir otro modelo de país
diferente al que impone hoy la gran-minería, los agro-negocios y los proyectos
de ciudad excluyentes.
Por esta razón, los 13 colectivos que
componen la Red llegamos a los siguientes acuerdos:
· Reafirmamos nuestra prioridad de
continuar en la construcción del sector juvenil en el país, con otros y otras
jóvenes, para posicionar nuestras apuestas específicas frente a la exclusión
política que hoy vive la juventud. La construcción de sector sólo es posible si
somos con otros y con otras, y para que esta construcción sea efectivamente un
proceso conjunto, debemos continuar y
fortalecer la construcción desde la base, siendo éste el eje desde el cual
construimos nuestras apuestas políticas como juventud. En este sentido, es
nuestro sentir juvenil y por ende, nuestra participación y creación de espacios
contraculturales y libertarios, los que nos permiten construir con la
juventud, en diferentes escenarios y de
diferentes formas, nuevas apuestas emancipatorias.
· Reconocemos las implicaciones que
tiene la guerra en los jóvenes y las jóvenes en la ciudad, donde el proyecto de
ciudad-región viene imponiendo un modelo de segregación, represión, exclusión y
estigmatización. Ante esto, situamos nuestras apuestas juveniles desde las
prácticas contra-informativas, fortaleciendo nuestra identidad y cohesión territorial a partir de la educación popular
y la (contra)cultura.
· Ratificamos nuestra pertenencia, como
organización juvenil, al Tejido Juvenil Nacional Transformando a la Sociedad -
TEJUNTAS y a TEJUNTAS Bacatá como su expresión local, y a partir de estos, en
los espacios de articulación nacional del movimiento popular como son la Minga
de Resistencia Social y Comunitaria y el Congreso de los Pueblos, porque
estamos convencidos y convencidas de que la unidad se construye desde la base y
en la articulación efectiva.
· Ratificamos, asimismo, que la unidad,
aquella que se construye desde la movilización, la articulación y la
construcción conjunta de una propuesta de país por parte de los sectores
populares, constituye un proceso real de oposición a la clase dominante, cuya
ruptura refleja, únicamente, los intereses de una minoría que, a través del
poder coercitivo, pretende mantener sus privilegios a costa de la salud, la
educación, la vivienda y la vida de la mayoría de los colombianos y
colombianas. Ante las tensiones políticas al interior de la derecha, la unidad
del bloque popular es una necesidad urgente.
· En este sentido, afirmamos nuestra
participación, como actores políticos, en la construcción de la paz en
Colombia, una paz con cambios, con justicia social y para la vida digna. Paz
que encuentra un escenario concreto de acción y construcción popular en la Ruta
Social Común para la Paz, en donde nuestra participación, como Congreso para la
Paz, se articula con otras voces del pueblo colombiano con las cuales venimos
caminando para que se haga efectiva la participación de todas y cada una de las
expresiones y sectores del país. Dichas
propuestas, se harán públicas en el
Congreso Nacional Para la Paz que tendrá lugar los días 19, 20, 21 y 22 de
abril del presente año en Bogotá, y que
contará con la participación de todos y todas aquellas que quieran hacer la paz
con justicia social.
Firman la declaración:
•Colectiva
Juana Julia Guzmán
•Colectivo
6 de Mayo
•Colectivo
Contracultura
•Colectivo
Ecologista Totuma
•Colectivo
Frecuencia Libertaria
•Colectivo
Histeria
•Colectivo
Mecha Libertaria
•Colectivo
Res Gestae
•CEA-LA
(Centro de Estudios Abolicionistas por la Liberación Animal y de la Tierra)
•CILEP
(Centro de Investigación Libertaria y Educación Popular)
•ESPORA
(Contracomunicación y Colectivización del Conocimiento)
•Radio
Despertar Libertario
•RESMA
(Revolución Estudiantil Social Mentes Abiertas)
Red
Libertaria Popular Mateo Kramer
www.redlibertariapmk.org
1 comentarios:
INVITACION
De la manera más comedida me permito invitar a todos los organizadores y participantes del ENCUENTRO NACIONAL DE EDUCACION PARA LA PAZ a leer y discutir el DECALOGO DE LA PAZ y la REFORMA A LA EDUCACION EN SU MAS TIERNA INFANCIA contenidos en el blog www.laultimaoportunidad.com (La Patria Soñada). A manera de ilustración adiciono el siguiente fragmento del citado blog:
……La paz no es cuestión de acuerdos previos, ni de decretos, ni de leyes. La paz, como la violencia, es un fenómeno Cultural. La tolerancia, el deseo de convivencia, la voluntad de encauzar los instintos primarios, el respeto y la Colaboración mutua, son las propiedades que caracterizan al hombre de bien; por el contrario, la intolerancia, el afán de dominar, el irrespeto y el egoísmo, son instintos primarios y característicos del malevolente. En suma, la Paz la hacen los pacíficos, así como la violencia la hacen los violentos. De lo anterior se infiere que para que haya Paz, se requiere formar gente de paz.
Sólo habrá paz cuando el niño sea concebido y criado en un ambiente de altruismo (no egoísmo), autenticidad (no manipulación), persuasión (no fuerza) y encaminado a lo sublime: el arte, la virtud y en general, todo aquello que no se puede comprar (véase “Reforma a la educación”: Una cruzada por la paz).
La paz es un sistema auto organizado, o sea, es el orden dinámico que emerge en un sistema debido a la Interacción mutua de sus partes y procesos con el todo y viceversa hasta crear su propio orden.
De la interpretación de la naturaleza de la paz, en términos de los sistemas auto organizados, se colige que:
De la igualdad emerge la justicia si hay respeto al derecho ajeno. De la justicia emerge la dignidad, siempre y Cuando haya coherencia. De la dignidad, emerge la consagración al trabajo si hay autoestima; de esta Consagración, emerge el progreso, puesto que hay abundancia; y del progreso emerge la paz…..
Con las esperanza de encontrarlos en el citado blog me despido de ustedes.
Atentamente
______________________________
BENHUR CHICA GIRALDO M.S.C
PROFESOR JUBILADO U.N
Publicar un comentario