El magisterio antioqueño requiere de una dirigencia que responda a los retos y exigencias de las comunidades para exigir salud y educación para la vida digna

Colectivo pedagógico Orlando Zapata Giraldo

El magisterio antioqueño requiere de una dirigencia que responda a los retos y exigencias de las comunidades para exigir salud y educación para la vida digna

Desde nuestra postura de dirigentes, activistas, militantes de base y simpatizantes del colectivo pedagógico ORLANDO ZAPATA GIRALDO participe de la FUERZA NACIONAL MAGISTERIAL (FUNAMA), saludamos al magisterio antioqueño y expresamos algunos elementos frente a la coyuntura de profundización de las políticas neoliberales que este régimen desarrolla hoy con mayor claridad en favor de los organismos multilaterales como la OCDE (organización para la cooperación y el desarrollo económico), Banco mundial (BM), OMC (organización mundial del comercio) entre otros. Política que en América latina y en particular en Colombia se desarrolla desde la década de los noventa, entregando a particulares los principales sectores de responsabilidad estatal (salud, vivienda, vías, comunicaciones, educación, etc.)

En el caso de la Educación, esta política avanza a tal punto que la planta de personal se ha privatizado en un 14% y con la implementación de la Jornada Única aproximadamente en 10 años se habrá entregado a particulares el 42% de la educación oficial en Colombia, con el pretexto de la mal llamada calidad de la educación, calidad que sólo sacia los interés del gran capital.

Como colectivo pedagógico ORLANDO ZAPATA GIRALDO expresamos:

1.    Sobre la “nueva” evaluación con carácter diagnóstica formativa:

Equívocamente o tal vez en complicidad con el M.E.N el comité ejecutivo de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación FECODE se enfocó en cambiar el instrumento de evaluación, en palabras de la ministra, “por una no escrita, una que capture el momento de la clase”. Lo cual NO soluciona NADA en lo ABSOLUTO el problema de los Docentes del 1278 NO es que el examen sea escrito u oral, el verdadero problema es que el modelo de calificación está diseñado para que sólo la superen el 20% de los candidatos a ser ascendidos o reubicados, incluso con criterios de evaluación que hacen más difícil el ascenso o la reubicación salarial ya que amarran el instrumento de evaluación diagnóstica (el video) y el instrumento de formación (el curso) al numeral 2 del Artículo 36 del Decreto 1278 de 2.002, es decir que se aprueba el video o el curso de “formación” con más de 80%, igual que como sucedía con la “desaparecida” evaluación de competencia (según el Comité Ejecutivo de Fecode) y para rematar la deshonra y la vergüenza  también es variable de la ECDF la evaluación anual de desempeño, lo cual otorga más poder a los rectores para presionar o acosar a los Docentes del 1278.

En conclusión se sigue aplicando la regla fiscal y la disponibilidad presupuestal, de acuerdo al Acto Legislativo 01 y la Ley 715, dependiendo del Ministerio de Hacienda, los recursos que definen el ascenso en la carrera docente; en otras palabras, es de acuerdo con el presupuesto que determina el Gobierno que definen cuántos docentes pueden ascender; por lo que se constituye en criminal la ECDF que sigue estando diseñada para negar el ascenso a los nuevos maestros.

2.    En materia de salud:

En el departamento de Antioquia, después del PÉSIMO ACUERDO entre el comité ejecutivo de FECODE y el gobierno en esta materia, es indignante la precarización en la que ha caído la prestación del derecho a la salud del magisterio y sus familias; seguimos asistiendo al PASEO DE LA MUERTE, MENDIGANDO CITAS, CIRUGÍAS, MEDICAMENTOS entre otros. Por eso no podemos seguir permitiendo que este criminal sistema de salud siga ASESINANDO a los maestros y sus familias, lo cual nos coloca como dirigentes en una responsabilidad muy grande con miras a que le arrebatemos a la sanguinaria política neoliberal este programa para que sea administrado autónomamente con el objetivo noble de una atención digna en salud.

En este orden de ideas si los dirigentes, delegados e integrantes de las subdirectivas ejercen su papel con responsabilidad, lealtad, disciplina y CONCIENCIA DE CLASE, tendremos un sindicato fuerte y las bases reconocerán a sus líderes por sus acciones, por los resultados de los compromisos adquiridos.

Dada la difícil situación por la que  atravesamos, se hace necesario que entre todos y todas ayudemos a fortalecer nuestra organización sindical para contribuir en la generación de un movimiento capaz de enfrentar la aplicación de las políticas criminales que el Estado a diario ejecuta en contra del pueblo Colombiano.

Lo anterior sólo será posible con el concurso de todos, por eso desde ya convocamos al magisterio a que elijamos delegados y miembros de subdirectivas que posibilite avanzar y recuperar el movimiento magisterial junto con padres de familia y los estudiantes, solo así podremos defender la educación y salud como derechos.

¡SER EDUCADOR Y NO LUCHAR ES UNA CONTRADICCIÓN PEDAGÓGICA!

Construyendo Educación Popular.

“Una escuela popular es posible... Otra práctica sindical es urgente”