lunes, 23 de marzo de 2015

Funama le habla a los Maestros y Maestras de Colombia frente a la coyuntura política educativa FECODE – Gobierno.

El magisterio colombiano junto al conjunto de los trabajadores estatales del país nos aprestamos a protagonizar una de las luchas más determinantes en función de concretar las tesis históricas de defensa de la dignidad de los trabajadores de este país y de garantía de una vida digna para el resto de la población. Como empleados públicos somos los operadores, prestadores y garantizadores de los servicios y derechos básicos esenciales de la población. Es así que esta lucha no puede limitarse solo a lo coyuntural y cortoplacista: reivindicación salarial y prestacional, sino tocar temas esenciales que podrían poner en peligro la existencia y garantía misma de parte del Estado de esos servicios y derechos básicos prestados desde lo público y solo desde lo público. (valga la redundancia)y aun hoy tan violados por el mismo estado.
La macondiana dinámica  de la política en Colombia nos presenta en esta coyuntura el siguiente escenario: estamos adportas de poner fin a un conflicto armado de 50 años de duración, conflicto armado que tiene como principal causa desencadenante, las condiciones de inequidad social y económica del país (a esta conclusión llegan la mayoría de los informes presentados en la Habana por los académicos de la Comisión Histórica del Conflicto), en consecuencia si el “enemigo interno” del estado colombiano se “desmoviliza armadamente” y pasa a “movilizarse políticamente”, los inmensos recursos invertidos en la guerra no se justificarían  ya, y el PIB en algunos de esos servicios y derechos básicos como por ejemplo la educación tendrían que intensificarse.
El anterior análisis, calificado de simplista por los tecnócratas del Ministerio de Hacienda y Planeación Nacional, es reemplazado por una propuesta de Plan Nacional de Desarrollo a aplicarse para los próximos cuatro años inspirado “técnicamente” en el concepto de eficiencia en el gasto.
Tecnócratas  económicos  y  políticos  combinan  dos  estrategias,  los  segundos  diseñan  “revolucionarias”  políticas “sociales” que no son más que demagogia pura y los primeros se encargan de hacer maromas económicas basadas en la metáfora de la cobija pequeña y el cuerpo grande. ¿Cómo cobijar la cabeza sin descobijar los pies? Pues aunque no lo creamos estos magos de la tecnocracia son capaces de hacernos ver que con la misma cobija pequeña es posible cobijar pies y cabeza a la vez. Y lo peor de todo es que tal fantasía es presentada como realidad por sus secuaces comunicadores de masas (léase periodismo empresarial).
Solo priorizando y aumentando los recursos en donde debe ser, esto es en los servicios y derechos básicos esenciales es que las coberturas se hacen reales, la calidad se hace real y por lo tanto el bienestar social también es real y no una falsa apariencia de la realidad.
En materia educativa el PND (plan nacional de desarrollo),  plantea el preescolar de tres grados como política esencial del Estado, pero no garantizada desde el sistema educativo público estatal, sino con la estrategia tecnócrata de “introducir los lineamientos curriculares básicos del preescolar en los jardines y hogares sociales de bienestar familiar que  cumplen  funciones  de  cuidado  de  los  niños  y  que  ahora  deberán  asumir  tareas  educativas”  Otro  malabar tecnocrático consiste en “capacitar a las señoras cuidadoras de estos jardines u hogares para que puedan desarrollar estos lineamientos curriculares básicos”. Mejor dicho la Licenciatura en Educación Preescolar es condenada a su desaparición.
El otro proyecto estrella de la tecnocracia es la llamada “jornada única” la cual se implementará también sin invertir los recursos necesarios para esto, es decir, estirando la cobija para que alcance a cubrir todo el cuerpo. Detrás de esta estrategia se esconde uno de los procesos de racionalización de planta docente más grande de los últimos años, semejante al del año 2001 en adelante cuando con el decreto 1850 de 2.002 que reemplazó al antiguo decreto 179 de
1.982, el Estado le incrementó al magisterio su asignación académica en 4 horas semanales. Pasamos de 24 horas clase de 45 minutos cada una, es decir 18 horas a la  semana a 22 horas clase de 60 minutos, es decir 22 horas a la semana. Igualmente con la eliminación de las cuatro horas de descarga que el decreto 179 de 1.982 le hacía a los directores de grupo, no se sabe cuántos más docentes se ahorró. Consecuencia de lo anterior fue disminución de la planta docente en mínimo unos 25.000 educadores e incremento de las enfermedades de carácter psicológico por estrés laboral.
Con la jornada única se incrementa la jornada laboral de los incautos docentes que acepten las 10 horas extras que la administración les va a asignar sin un reconocimiento salarial proporcional al esfuerzo realizado y la planta de personal se congela ya que los maestros excedentes fruto de la racionalización de la planta a través de imponer la hora efectiva de clase de 60 minutos, son los que cubrirán la llamada “Jornada Única” afectando su vida familiar ya que la jornada global será de 9:00 a.m. a 3:00 p.m. como mínimo. La planta se congela ya que no hay necesidad de crear nuevas vacantes, con las existentes actualmente, más o menos unas 300.000 se atenderá la “Jornada Única”.
La anterior política es política estructural del Estado que afecta la dignidad del magisterio y una educación pública integral ya que la J.U.(jornada única) se centra en el incremento de matemáticas, ciencias, lenguaje e inglés, cumpliendo fielmente los mandatos de la OCDE(organización para la cooperación y el  desarrollo económico) ¿Será entonces que además de la licenciatura en preescolar las otras licenciaturas distintas a matemáticas, ciencias, lenguaje e inglés, también desaparecerán?, analice y deduzca usted.
Tenemos entonces unas políticas estructurales del Estado que a mediano y largo plazo afectan la dignidad del magisterio y la integralidad de la escuela pública colombiana y un pliego de peticiones centrado en reivindicaciones economicistas coyunturales.
Aceptamos parcialmente que las anteriores reivindicaciones estén presentes en el pliego, pero extrañamos que en el mismo no se haga alusión a puntos estratégicos que a mediano y largo plazo coadyuvarán en la pauperización del magisterio colombiano, en la precarización de la educación   y en la dependencia total del currículo escolar de las políticas económicas de agencias extranjeras.
¿Cómo afrontar el paro para que por lo menos estas reivindicaciones estomacales no se  convierta en un baño de agua fría más para el magisterio? Debe ser transversal izando la lucha, es decir no desarrollar una lucha meramente gremial, ni aislada,   sino  desde lo Estatal: Justicia, salud, educación, servicios básicos esenciales como agua, electricidad y alcantarillado y además también desde el sector productivo petrolero generador de divisas para el país.
En el año 2013, mes de agosto, planteábamos unirnos al paro agrario, pero no se hizo y el levantamiento del paro magisterial lo ordeno JUAN MANUEL SANTOS desde la casa de Nariño, en el momento en que más impulso estaba tomando por el ánimo creciente del magisterio frente al mismo.
Desde ya hay que ambientar el paro, por eso saludamos la decisión de la ASOCIACIÓN DISTRITAL DE EDUCADORES  y de los demás sindicatos regionales que así lo decidan de asumir la movilización del 19 de marzo  como paro magisterial DE 24 HORAS, dándole una lección a la dirigencia nacional del magisterio de claridad en la elección de los métodos de lucha.
Acciones como la anterior unidas a otras pensadas desde la creatividad que nuestra formación pedagógica nos brinda permitirán que esta nueva lucha alcance a tocar algo de la estructura de la política nacional para ambientar un escenario futuro de verdadera paz con justicia social.
La fuerza nacional magisterial FUNAMA llama al magisterio de todo el país a estar en pie de lucha y en máxima alerta en el proceso de negociación que la federación realice con el gobierno de Juan Manuel Santos. De igual manera llama a la directiva de la FECODE para que a través de sus organismos democráticos le deje claro a los maestros los objetivos concretos del paro estipulados en el pliego y los alcances o logro de los mismos definiendo unos mínimos y unos máximos que determinen la continuación o el levantamiento del paro, determinando mecanismos de consulta en donde las bases jueguen su papel protagónico y no sean invitados de piedra a decisiones que se tomen desde las cúpulas gobierno-FECODE.


1 comentarios:

Benhur Chica Giraldo dijo...

ALGO PARA REFLEXIONAR:

* La escuela es tan grande como sus maestros; y, un país, es tan grande como su escuela.

Conciencia es el pensar de los pensares, ejemplo: Pienso, luego existo (R. Descartes).

* Dime cuánto haz pensado en contribuir personalmente al bienestar social, y yo te diré que grado de conciencia tienes.

Publicar un comentario

Seguidores

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More

 
Powered by Blogger