LA UPN SE MOVILIZA: MARCHA DE
BACINILLAS
El día 26 de marzo del presenta año la
comunidad universitaria de la UPN entre trabajadores, docentes y estudiantes se
dirigieron a las instalaciones de Bienestar Universitario y la sede
administrativa de la universidad, el resultado de la acción fue la toma de la
sede administrativa, y por consiguiente, la instalación de una mesa de trabajo
entre la comunidad universitaria y la administración de la universidad.
Los principales reclamos, consignas y gritos
de denuncias de las personas que se movilizaban en plena calle del centro
financiero de Bogotá, expresaban su inconformidad por el estado actual de la universidad. Reclamos
que consistían principalmente en el cierre del restaurante por dos meses a
causa de una explosión de la caldera del restaurante a finales de enero,
arreglo que tardo demasiado tiempo, y le costó a la universidad 342.000.000 de pesos. Denuncias a la poca
capacidad de subsidiar a 10.000 estudiantes, porque tan solo el 20% de los
estudiantes reciben un subsidio alimentario que les permite pagar 10.000 pesos
para 10 almuerzos.
La crisis sanitaria se refleja en la
universidad en varios casos: solo funcionan 4 puntos del servicio del baño en
la sede de la calle 72 para 5.000 estudiantes que transitan en esta sede
aproximadamente, en la sede del parque nacional no existe agua potable, en la
sede de Valmaria siempre que llueve se inunda además, los trabajadores de la
universidad manifiestan su inconformidad por el poco personal de planta para el
trabajo y mantenimiento de las instalaciones de la universidad, también expresan las pocas herramientas que
la administración dispone para las tareas, esto con lleva a una prolongación en
la realización del trabajo. Así mismo Denuncian los señalamientos de la
administración porque “no se ponían la
10 para trabajar en pro de la universidad” les dijo el doctor Guillermo Tamayo
(vicerrector administrativo y financiero). Los trabajadores responden que son
ellos quienes trabajan más para que la universidad se encuentre de la mejor
manera posible para la realización de las actividades académicas.
Todas las anteriores denuncias pertenecen a
una sola dimensión: la crisis financiera, Pues no alcanza el presupuesto de la
nación para el funcionamiento y el sostenimiento de la UPN, los 65.000 millones
de pesos son insuficientes del estado, como también son insuficientes los
41.000 millones de pesos que la universidad consigue por su propia cuenta, un
total de 106.000 millones de pesos. Esto no alcanza para arreglar todos los
daños que tiene la universidad, sus puertas, los salones, las paredes, las
edificaciones, etc. Esto no alcanza para la contratación de docentes de tiempo completo,
para la investigación, ni para material bibliográfico que se requiere en la
biblioteca central para 10.000 estudiantes. Lista larga e interminable que
haría demasiado extenso el presente texto.
En síntesis, la administración no tiene una
planeación acertada para contra restar los problemas latentes que se viven día
a día en la universidad. Por tal razón la movilización y presión ejercida
por la comunidad universitaria, conlleva a la instalación de una mesa que
fortalezca la comunicación de los que habitan el campus universitario de la UPN.
El próximo encuentro entre los estamentos de la universidad y la administración
será en la sala de juntas del edificio administrativo el 10 de abril 2 pm,
donde se discutirá la metodología de la rendición de cuentas pública por parte
de la administración, como también discutir una hoja de ruta a trabajar el
resto del año.
Representante de los estudiantes ante el
consejo superior.
Heiler Lamprea
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