Se
cumplieron este miércoles 11 años del homicidio de Jaime Acosta, un estudiante
de la UIS quien fue asesinado el 20 de noviembre del año 2002 en medio de una
protesta universitaria y a escasos metros de la puerta de entrada del campus de
la UIS en Bucaramanga.
Él
joven recibió un tiro en su pecho por parte de integrantes del Esmad y perdió
su vida minutos después. La protesta exigía medidas para mejorar el reglamento
estudiantil que se estaba imponiendo por parte del Consejo Superior, una tabla
de matrículas y seguridad en el bienestar universitario. Los efectivos del
Esmad llegaron a reprimir la manifestación a las 10:45 de la mañana y mataron a
Jaime hacia las 11:00 a.m.
Oscary
Ávila, líder estudiantil de la Universidad Industrial de Santander, precisa con
pesar pero con entereza: “Hoy, lo que se exigía hace 11 años sigue vigente. De
hecho, el manual de reglamento que se aprobó en esa fecha sigue vigente, no se
pudo tumbar. La desmilitarización sigue siendo uno de los derroteros del
movimiento estudiantil. Los que estaban dirigiendo la universidad siguen siendo
los mismos. No hay espacios de diálogo. Evidentemente, hoy queremos recordar a
Jaime Acosta como uno de los estudiantes que perdieron su vida por pensar en
una universidad pública al servicio de las mayorías nacionales y que cumpla su
función social”.
En
efecto, Acosta es uno de los seis estudiantes que ha perdido su vida por acción
de la fuerza pública en Colombia, defendiendo el carácter público de la
universidad, batalla que lejos de terminar parece recrudecerse en estos días.
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