*El uso del
femenino en este escrito es intencional, lo empleamos
para referirnos a las personas.
Para
infortunio del estudiantado de la Universidad Distrital ni en vacaciones la
encarnizada camarilla administrativa da tregua. En efecto, hace algunos días
empezó a circular una información en la que se afirmó un inminente traslado de
los proyectos curriculares de Lengua Castellana y Pedagogía Infantil de la sede
de la Macarena[1] hacia un predio alquilado en la Calle 58 con Carrera 17, el
argumento para dicha determinación alude al innegable hacinamiento que se vive
en la facultad según han comentado algunas instancias oficiales.
La decisión
inmediatamente levantó ampolla y las reuniones estudiantiles no se dieron a
esperar, diversos argumentos se han escuchado sobre el carácter nocivo de la
medida para el tejido social de la facultad y la desconfianza que genera el
cambio de sede en términos de garantías[2]. En algunas de dichas reuniones las
estudiantes hemos interlocutado con
funcionarias administrativas[3] para encontrar soluciones pertinentes,
no obstante, la respuesta por parte de
los entes competentes ha sido la de ratificar la determinación la cual
consideran irrevocable por las
condiciones materiales de hacinamiento y la firma de documentos como el de arrendamiento del predio al cual serían
traslados los dos proyectos curriculares. En términos prácticos según la
planeación de la universidad con las condiciones actuales se tendría una
asignación de 2.7 salones por proyecto curricular, mientras que efectuando el
traslado de Lengua Castellana y Pedagogía Infantil la cifra aumentaría a 3.3 lo
cual a todas luces resulta bastante
insuficiente para resolver el problema del agobiante hacinamiento.
Además de la
ineficacia de la ridícula “solución” preocupa a las estudiantes el acerbo
histórico que reposa cuando se han adoptado este tipo de medidas en la
universidad como los casos de las licenciaturas en Ciencias Sociales y
Matemáticas las cuales bajo argumentaciones similares a las presentadas
actualmente sufrieron también traslados o
los 7 años aproximadamente que se
lleva luchando en el proyecto de Administración Deportiva por mejores
condiciones de infraestructura, todos estos y otros casos tienen como elemento
característico el incumplimiento por parte de la administración de los acuerdos
establecidos en cada una de las situaciones. Por otra parte, no es fortuito que
se tomen medidas de este talante en el contexto de la reforma orgánica que se
discute actualmente en el CSU la cual contempla entre sus diferentes
repercusiones negativas la desaparición de la Facultad de Ciencias y Educación
tal y como la conocemos hoy en día.
Dicha propuesta ha encontrado un enérgico rechazo en importantes sectores de la
vida universitaria, razón por la cual, no resulta descabellado pensar que el
traslado que se propone en la actualidad responde al interés de mermar la
fuerza y resistencia que se orquesta en la Macarena.
En relación a
lo anterior más allá del traslado de un par de proyectos curriculares lo que se
evidencia aquí es la imposición de un modelo de universidad en el que un
pequeño grupo de personajes toman decisiones de la manera más vertical y
unidireccional posible a espaldas de la gran comunidad que comprende a la
UD. Es por esto que los procesos de
organización estudiantil continúan
avanzando arrojando resultados como los evidenciados en la más reciente
asamblea[4] donde se ratificó la postura de no permitir que ningún proyecto sea
trasladado de la facultad, además, de
asumir algunas tareas concretas de agitación con miras a ampliar la discusión
dentro de la comunidad universitaria sobre esta situación y la posibilidad de
plantear una propuesta con respecto a la asignación de salones[5] para
solucionar momentáneamente el problema de hacinamiento en la facultad.
Mientras
tanto desde el Grupo Estudiantil Anarquista (GeA) continuamos apoyando las
iniciativas organizativas de base que le permitan a estudiantes, docentes y
trabajadoras en general luchar por
condiciones dignas para la construcción de una universidad critica y
transformadora. En ese sentido, no está de más invitarlas a todas a crear y/o
fortalecer espacios de participación como lo son los Consejos Estudiantiles.
Nos vemos en
la asamblea triestamentaria que se desarrollará el día 8 de agosto en las
instalaciones de la Macarena para tratar esta y otras problemáticas y así entre todas empecemos a gestar nuevas formas
de hacer y decidir los rumbos de nuestra universidad.
¡LA DISTRITAL NO SE FRAGMENTA, LA DISTRITAL
SE RESPETA!
____________________________________________
[1] Donde funciona actualmente la facultad de
Ciencias y Educación
[2] Fotocopias,apoyo alimentario,biblioteca,
servicios médicos, etc.
[3] Directoras de proyectos curriculares,
decanatura y planeación
[4] Desarrollada el 25 de Julio del 2013 con la
participación de estudiantes de las Licenciaturas en Pedagogía Infantil, Lengua
Castellana, Sociales, Matemáticas y Biología principalmente.
[5] Básicamente consiste trasladar las oficinas
administrativas existentes actualmente en la Macarena B para que sean
readecuadas para funcionar a manera de
salones de clase como lo hacían en el pasado. Las oficinas funcionarían
en salas que hoy en día se encuentran sin funcionamiento en la Macarena A.
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