Los estudiantes iniciaron la Huelga exigiendo mejoras en las condiciones académicas de la institución y el derecho a una educación de excelencia. Han manifestado que decidieron tomar esta vía con el inamovible deseo y ánimo de transformar la indignante realidad en la que se encuentran y que por lo tanto no levantarán la Huelga hasta no obtener verdaderos resultados.
“La mayoría de los estudiantes de la Universidad de Cundinamarca somos estudiantes de a pie, estudiantes con dificultades, de las que es culpable este sistema: matrículas elevadas, contratación ilegitima y tercerización docente. Nosotros podemos padecer hambre, pero, también tenemos el sueño por una Universidad digna” manifestó uno de los estudiantes al momento de iniciar la huelga. “Ponemos en riesgo nuestra integridad física y de aquí no nos movemos. Esperamos su apoyo, disculpen las molestias, pero esta es una revolución del pensamiento” concluyó el estudiante.
A las exigencias de los estudiantes se suma el nombramiento de profesores planta, al igual que la búsqueda de certificación de calidad para los programas académicos, porque es la única institución educativa pública que no tiene este reconocimiento.
Transcurridas 100 horas de iniciada la Huelga, las directivas de la Universidad de Cundinamarca se han mostrado indiferentes, pues por el momento no han realizado -ni siquiera- un pronunciamiento sobre los acontecimientos.
El Agua de los huelguistas empieza a escasear, los estudiantes realizan llamado a la solidaridad ya que necesitan urgentemente líquidos para hidratación; al tiempo que una de las estudiantes que participaba tuvo que ser trasladada de urgencias a un hospital de la ciudad por su deplorable estado de salud.
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