Con un recorrido por las instalaciones de la Universidad Industrial de Santander, UIS, y rompiendo el protocolo del Consejo de Seguridad Regional, el ministro de Defensa Rodrigo Rivera Salazar, empezó su visita a la capital santandereana.
Según dijo a los medios de comunicación, le dio prioridad al llamado de la comunidad universitaria para conocer en detalle los hechos ocurridos el jueves 16 de junio, en los que un grupo de encapuchados ocasionaron daños superiores a los 3 mil 500 millones de pesos.
El Ministro recibió testimonios de las víctimas, vio los destrozos y videos en los que identificó la participación de grupos "que hacen parte de la estructura de las Farc", dijo Rivera con base en los informes de inteligencia presentados por las autoridades.
"Los estudiantes y los profesores reclamaron la presencia de la fuerza pública y quiero decirles que he dado precisas instrucciones para que esto se atienda con la mayor diligencia. La fuerza pública custodiará la UIS desde ahora", aseguró el Ministro.
También dijo que entregará una recompensa por 50 millones de pesos a quien dé información sobre las personas que lideraron las protestas.
"Eso significa labores de inteligencia para individualizar a los miembros de esta estructura y obtener órdenes de captura contra ellos, llevarlos a que respondan por este hecho y por la pertenencia a las Farc, por el delito de rebelión con fines terroristas ante la justicia colombiana", añadió Rivera Salazar.
Reductos de las Farc
El Ministro de Defensa dijo que vio en las imagenes grabas dentro de la Universidad, la participación de integrantes del Eln, del Partido Comunista Clandestino PC3, el Movimiento Bolivariano de la Nueva Colombia y las juventudes del M-19 a través de la Brigada ‘Carlos Toledo Plata’.
"Los terroristas cruzaron la raya, antes podía haber duda de que se le fue la mano a unos pobres estudiantes que querían protestar, ahora no nos queda duda de que son terrorista; ellos mismos se encargaron de identificarse como tales", aseguró el Jefe de esta cartera.
"Sabemos que pueden haber estudiantes extraviados y confundidos, que iban a una manifestación y de la noche a la mañana se encontraron en medio de una formación uniformada de integrantes de las Farc.
"A ellos les ofrecemos los beneficios jurídicos que se derivan de la colaboración, que nos den información que nos permitan identificar a quiénes los condujeron y orquestaron estos actos", concluyó el Ministro de Defensa quien se declaró aterrado con los destrozos que hicieron en la protesta.
Voces universitarias encontradas
Para el rector de la UIS, Jaime Alberto Camacho Pico, cuando el desorden y la violencia desbordan la capacidad de la institución, la fuerza pública tiene la obligación y el deber constitucional de garantizar la seguridad a los miembros de la universidad y sus bienes.
"Considero que en el momento en que la fuerza pública tome la decisión de ingresar lo hará porque sabe las condiciones internas que en ese momento se generan. Lo harán de la manera más profesional para garantizar el control del campus para impedir los actos de destrucción", aseguró Camacho Pico.
Representantes estudiantiles y defensores de derechos humanos que pidieron reserva de sus nombres por cuestiones de seguridad, aseguraron que la medida tomada por el Ministro de Defensa es preocupante. "Esto puede servir para que se den desapariciones y persecuciones. Es bueno que la decisión se discuta entre la comunidad universitaria", añadieron.
Rafael Isaac, ex presidente de la Asociación de Profesores de la UIS, aseguró que no está de acuerdo con que se tomen medidas policivas y militares, así lo pidan estudiantes y profesores.
"Se debe buscar el consenso de toda la comunidad universitaria para rechazar las protestas y los actos vandálicos. El problema es que en la universidad no hay medios de expresión, la actitud es "se tomaron la universidad y miremos haber qué pasa". Además, los únicos que se expresan libremente son las directivas", dijo el profesor.
El próximo martes se realizará una reunión del Sindicato de la Universidad y se realizará un pronunciamiento sobre el tema.
Otras conclusiones del Consejo de Seguridad Regional
En general, Santander registra un avance positivo en todos los indicadores de seguridad; sin embargo, algunos municipios presentan falencias en temas como lesiones personales, riñas, intolerancia, convivencia, violencia intrafamiliar y hurto.
Los esfuerzos por mejorar se concentrarán en la agenda de la seguridad ciudadana, en reducir criminalidad vinculada ya no tanto con organizaciones criminales poderosas, sino con fenómenos como el microtráfico de drogas y el consumo, el hurto y delitos contra el patrimonio económico.
Se realizará el lanzamiento de la política de seguridad ciudadana para la convivencia, con el apoyo de alcaldes, gobernadores, empresarios, comerciantes y distintos sectores para hacer aportes sobre el tema de manera colectiva.
Se fortalecerá un observatorio criminológico de delitos que permita profundizar en estos temas, sin sesgo político, y con una aproximación científica, que sirva de base para las decisiones que deben tomar los gobernantes y las autoridades.
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