Pese a
actos represivos por parte de fuerza pública.
Estudiantes
de diferentes universidades se han dado cita desde el 28 de abril para unirse
al Paro Agrario, Campesino, Étnico y Popular, con la convicción de que los
problemas de fondo del país no afectan solamente a los campesinos, sino que también
involucran a la cuidad.
El
pasado lunes 28 de abril se inició, por cuenta de la Universidad Pedagógica
Nacional, una serie de jornadas de pupitrazos realizados también en la
Universidad Nacional el 29 de abril y en la Universidad Distrital Francisco
José de Caldas, 30 de abril.
En la
Universidad Pedagógica los estudiantes se tomaron pacíficamente la calle 72, en
donde se realizó un campeonato relámpago de Futbol y se cantaron varias
consignas en apoyo y desarrollo al Paro Agrario, Campesino, Étnico y Popular;
al cabo de media hora la fuerza represiva del ESMAD irrumpió con gases y
aturdidoras en contra de la comunidad estudiantil, ocasionando varios daños al
interior de la universidad.
Los
estudiantes de la UPN han venido construyendo una agenda de movilización, que
tiene como objetivo visibilizar la lucha de los y las estudiantes y su apoyo y
articulación con el Paro.
Por su
parte, la Universidad Nacional lideró
una nueva jornada de pupitrazo el
día 29 de abril, que inició en la calle
26; pasaron sólo 10 minutos para que el ESMAD arremetiera de nuevo. Hay que
tomar en cuenta que el día anterior la Universidad fue cerrada arbitrariamente por el rector
Mantilla.
También
este 30 de abril se presentaron pupitrazos en todas las sedes de la Universidad
Distrital. Al igual que en los demás centros de estudio la represión no se dio
a esperar; el ESMAD atacó a la comunidad estudiantil dejando como resultado siete estudiantes heridos.
Pese a
estos actos de violencia por parte de la fuerza pública los estudiantes
expresaron su voluntad de seguir apoyando al paro, hasta que el gobierno no
garantice soluciones reales a la crisis que hoy en día se vive en el campo
colombiano, crisis que se evidencia también en las ciudades.
Los
estudiante, quienes expresaron su voluntad de movilizarse este 1 de mayo,
plantean que denunciarán la situación del territorio urbano y exigirán un habitad y vivienda digna, mínimos vitales de agua y energía, la
reducción del 50% en combustibles, el
respeto a los derechos fundamentales y un plan de ordenamiento territorial
que sirva a las realidades del pueblo colombiano.
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