El 24
de octubre los integrantes de la MANE volverán con otra marcha y el 31 saldrán
con disfraces, en alegoría al que supuestamente tiene puesto el Gobierno. Según
dicen dos de sus voceros, el Ministerio de Educación mantiene cerradas sus
puertas.
María
Alejandra Rosas, integrante de la MANE
“El
diálogo con el Gobierno no existe”
La MANE
tiene listas varias movilizaciones y otros actos colectivos para la semana
entrante y siguiente. ¿Por qué organizaron este nuevo ciclo de protestas?
En el
octavo plenario de la MANE, realizado entre el 5 y 6 de octubre pasados, se
concluyó que debíamos convocar al próximo paro nacional universitario para
manifestar nuestra preocupación por la profundización de las crisis en las
universidades públicas: en materia financiera, en el tema de democracia en
cuanto a la toma de decisiones y en el de las libertades y garantías para ejercer
nuestros derechos de movilización y protesta.
¿Qué
pretenden lograr con el paro?
Llamar
la atención del Gobierno sobre la problemática de la educación y presionarlo
para que se abra un debate público sobre tres puntos: 1. La deuda del Gobierno
con las universidades. 2. Las propuestas sobre el modelo de educación que deben
ser discutidas democráticamente en una mesa de concertación en la que se
sienten el Gobierno, la MANE y otros sectores del área. 3. Las garantías para
ejercer el derecho a la protesta en tanto que se están criminalizando y
estigmatizando las movilizaciones estudiantiles con la militarización de
algunas universidades, la presencia de los escuadrones antidisturbios y los
señalamientos y medidas policivas contra los participantes de las marchas.
¿Por
qué han dividido las movilizaciones en varios actos?
Porque
tienen diversos objetivos: la movilización del miércoles 16 y jueves 17 de la
semana entrante es una protesta de todas las universidades públicas del país. A
partir de esos dos días, cada universidad definirá, en su autonomía, si
continúa en cese de actividades o no, dependiendo de sus circunstancias
particulares. El 24 de octubre desarrollaremos una segunda jornada de
movilización nacional para enfocarnos en el problema del presupuesto que
destina el Gobierno Nacional a la educación pública. El 31 habrá una marcha de
disfraces con el objetivo de plantear, simbólicamente, el que se pone el
Gobierno cuando se refiere a su compromiso con las universidades. Por eso le
pusimos un nombre a ese acto de protesta: “No más disfraces, Santos”. Y, por
último, programamos una marcha para el 7 de noviembre, cuando se cumplen dos
años de la caída, gracias a la presencia masiva de la MANE, de la reforma a la
Ley 30 presentada por el Ministerio de Educación en 2011. A partir de ahora, el
7 de noviembre se conocerá como el día de la “Dignidad educativa”.
¿A
cuántos estudiantes representa, en realidad, la MANE?
En el
país hay alrededor de 32 universidades públicas y, según las estadísticas más
recientes, hay más de un millón de estudiantes en estos centros educativos. En
2011 logramos el mayor número de participantes en una movilización: salieron
cerca de medio millón de jóvenes en toda Colombia. Este año estamos apostándole
a que se llenen las calles de varias ciudades para que el mensaje de la defensa
de la educación pública sea fuerte y claro.
¿Tienen
relación con otros sectores de la educación como profesores o trabajadores de
universidades?
Sí.
Estamos consolidando relaciones con organizaciones de profesores y con
sindicatos de trabajadores de las universidades porque tenemos problemas en
común.
Antes
de tomar la decisión de movilizarse de nuevo, ¿intentaron volver a conversar
con el Ministerio de Educación o con otros despachos del Gobierno?
El 29
de agosto pasado, que fue el día de la primera movilización de la MANE este
semestre, radicamos una carta de ocho puntos en el Ministerio de Educación y en
el Congreso de la República. Hasta el momento no tenemos ninguna respuesta de
alguna de esas dos instituciones, excepto la de una invitación general, que
hizo el Ministerio, a participar en la construcción de políticas educativas.
Pero ese, como le digo, es un llamado general. No una respuesta a la MANE.
¿Con la
ministra de Educación han logrado tener algún contacto?
No. En
2013 no hemos hablado con ella.
De
nuevo: ¿lo han intentado?
Sí,
claro. María Fernanda Campo forma parte del Consejo Superior de la Universidad
Nacional. Y nosotros la invitamos a que hiciera un consejo superior ampliado en
donde tuviéramos cabida todos y pudiéramos discutir los temas que le he
mencionado. Pero la negativa a estar en un espacio de debate abierto, en el que
participaran los estudiantes y el resto de la comunidad universitaria, fue
radical.
¿El
diálogo con el Gobierno Nacional es imposible, según ustedes lo ven, o aún se
puede construir un puente que evite rupturas totales?
Hasta
este momento el diálogo no existe. El Gobierno ha expresado con claridad su
intención de quitarle la visibilidad, ante la sociedad, a la MANE y al
movimiento estudiantil. Pero nuestra intención siempre ha sido la de abrir la
posibilidad de diálogo. Como entendemos que esa posibilidad no surge de manera
espontánea, sabemos que tenemos que impulsarla con estas movilizaciones y con
el apoyo de la sociedad colombiana que también reacciona si nos hacemos
escuchar.
Jairo
Andrés Rivera, vocero de la MANE
“La
capucha no siempre está ligada a la violencia”
¿Cuáles
son los problemas que ustedes le ven al modelo de educación?
Que es
excluyente y que carece del sentido de lo público, tanto en las universidades
del Estado como en las privadas, así como del de la función social de la
educación. En las estadísticas se refleja lo que es: sólo 5 de cada 10
bachilleres acceden a la educación superior. De ellos, sólo uno tiene la
oportunidad de contar con educación superior de calidad (pública o privada) de
alto costo. Entre esos mismos 5, únicamente llegan a graduarse 3, y de éstos,
uno consigue trabajo por su propio esfuerzo y sin apoyo del Estado. Pero,
además, el sistema educativo público colombiano no es gratuito y su calidad
cada año que pasa es peor porque el presupuesto que le asignan es más bajo.
En
materia de movilizaciones las autoridades advierten el peligro de que haya
“infiltrados” que generen violencia. ¿Cómo han pensado controlar ese factor?
La
primera herramienta que tenemos para adelantar un movimiento estudiantil
contundente es la convocatoria a marchas pacíficas, masivas y creativas. Esto
por un lado. Por el otro, igualmente repudiamos todas las formas de prejuicio
sobre las protestas ciudadanas y la criminalización que se hace contra ellas, o
la represión con que pretende controlárselas. Hemos dicho que no creemos que
existan infiltrados en la universidad en el sentido en que lo entiende el
Gobierno, como expresiones de la guerrilla o de otros grupos armados. Si los
estudiantes hacen uso de su derecho a pensar libremente, dado que la naturaleza
misma de la universidad es la libertad de pensamiento, eso no convierte a
quienes se expresan de una manera específica en infiltrados.
El
Gobierno se refiere a las acciones de los “infiltrados” cuando personas que se
mezclan con los estudiantes lanzan piedra, papas bomba o usan otro tipo de
violencia. ¿Ese fenómeno no existe para ustedes?
Claro
que existe, pero interpretamos que son estudiantes que utilizan otros
mecanismos de protesta distinta a la de nuestras convocatorias. Y creemos que
la forma en que debemos hacerle frente a ese tipo de hechos no es la de la
denuncia o la de la judicialización, como pide el ministro de Defensa, sino la
de la construcción de pedagogía y de una cultura de la protesta estudiantil. Si
bien no compartimos esas actitudes, sí entendemos que muchos estudiantes —como
los campesinos y otros manifestantes— reaccionan con fuerza ante la acción
violenta del Estado que no por legal es legítima.
La
capucha se ha convertido en un símbolo de violencia para el grueso de la gente.
¿Para ustedes también?
No. No
creemos que la capucha esté siempre ligada a hechos de violencia. Esa es una
generalización que ignora fenómenos históricos como el de los zapatistas en
México o el del movimiento de los indignados en las redes sociales y que se
utilizaba más como modo de protección que de ataque. No estamos de acuerdo en
que conviertan automáticamente a un estudiante en falso positivo por el solo
hecho de usar una capucha.
El 31
de octubre, día de los disfraces de protesta estudiantil, ¿permitirán capuchas
o antifaces, o para evitar malos entendidos los evitaran?
La idea
de esa marcha es que la gente se disfrace simbólicamente, en defensa de la
educación. La creatividad de cada quien puede desplegarse como sea, para
participar en una movilización llamada a ser pacífica.
¿Es
cierto que hay estudiantes de la MANE detenidos y bajo cuáles cargos?
Es
cierto. El movimiento estudiantil ha sido víctima de retenciones, detenciones,
encarcelamientos y de desapariciones, asesinatos y exilios. En cuanto a las
detenciones, durante las movilizaciones de 2011 fueron encarcelados Jorge
Eliécer Gaitán, de la Universidad Surcolombiana; de esta misma universidad,
Carlos Lugo, cantante y compositor, que también fue dirigente estudiantil y
quien se estrenaba como profesor allí mismo; y Ómar Marín, de la Universidad de
la Amazonia. Ellos fueron detenidos por rebelión y por otros cargos, pero estos
últimos no prosperaron. Sin embargo, continúan detenidos en La Picota y en
Florencia. Hemos exigido su liberación inmediata y pedido que nos expliquen por
qué los mandaron al Caquetá.
¿Quiénes
han sido asesinados y en cuáles fechas?
Nicolás
Neira, estudiante de secundaria, muerto en Bogotá, durante un enfrentamiento
con el Esmad en una de las marchas del 1° de mayo en 2003. Johnny Silva, Martín
Hernández, Julián Hurtado, Óscar Salas y Jean Farid Cheng Lugo murieron en
movilizaciones posteriores y en 2011. En cuanto a los exiliados, los
estudiantes que se han acogido a esa figura prefieren el anonimato por las
amenazas que les han llegado a ellos y a sus familias.
Si
pudiera sentarse unos minutos a hablar con el presidente Santos, ¿qué reclamo
le haría y qué solicitud le pediría?
El
primer reclamo que le haría sería el de decirle que no es posible hacer de la
educación los rieles por donde pasan sus locomotoras. La educación no puede ser
funcional ni servil al despojo, al desarraigo o a la guerra. La educación es
para que la dignidad humana se ponga por encima del mercado. A Santos no le
pediría sino que le exigiría sentarse en una mesa con todos los actores
sociales para abrir un gran diálogo en Colombia sobre la soberanía, la
democracia y la paz, tres principios por los que pasa la educación y que este y
el anterior gobierno han olvidado.
¿De
nuevo la perturbación social?
Contrario
a lo que sostienen los estudiantes de la MANE sobre el debilitamiento económico
de las universidades públicas, la ministra María Fernanda Campo reiteró que
nunca ese sector se había fortalecido tanto como con el gobierno de Santos.
Insistió en que en la pasada reforma tributaria se les asignaron $1,5 billones
a la infraestructura y a la calidad de los centros educativos estatales. Y en
que esto significa un aumento presupuestal de $260 mil millones. Campo también
relacionó los recursos de las regalías que les estarían llegando a las
universidades. Según ella, en cuantía de $330 mil millones, de los cuales $170
mil millones serían para invertir en la especialización de docentes. Pero la
MANE tienen cuentas diferentes. Los voceros estudiantiles de esa joven
organización, que ha demostrado capacidad de movilización de la población universitaria,
señalan que van de nuevo a paro porque, entre otras razones, el Gobierno le
adeudaría a la educación superior la gigantesca cifra de $11 billones. El
Ejecutivo tendrá que reaccionar con imaginación e inteligencia a las protestas
de la semana que empieza porque, además de la que hará la MANE, habrá otras
como la minga nacional indígena que se iniciará mañana.
Líderes
estudiantiles desde el colegio
María
Alejandra Rosas tiene 22 años, es estudiante de la Universidad Nacional y cursa
octavo semestre de fisioterapia. Después de obtener título de bachillerato en
la Institución Educativa Distrital Jorge Eliécer Gaitán, en Bogotá, se vinculó
a la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU Colombia) y pertenece a la
Mesa Amplia Nacional de Educación (MANE) desde cuando ésta se conformó, en
2011. Tiene su tiempo completamente copado: en las mañanas asiste a las
prácticas clínicas. Reparte las tardes entre las clases y las reuniones del
movimiento. Se convirtió en activista
estudiantil por su interés en defender la universidad pública a la que
ve debilitada. Jairo Andrés Rivera cumplió 24 años y acaba de terminar el pregrado
en ciencias políticas. Viene del colegio Champagnat de Ibagué y ha sido
defensor de la educación pública desde las movilizaciones de 2002, primer año
del gobierno Uribe, cuando la discusión se centraba más en el servicio militar
obligatorio y en el presupuesto nacional que le destinaba una gran suma a la
seguridad nacional mientras le bajaba los recursos a la educación. Es
representante estudiantil en el consejo superior de la Universidad Nacional y
puede ser reelegido porque continuará su carrera, ahora en una maestría.
Por:
Cecilia Orozco Tascón
2 comentarios:
CARTA ABIERTA AL PRESIDENTE SANTOS.
MENSAJE DE GABO –AJUSTADO A LA SALVACIÓN NACIONAL-
La Modernización de un País es imposible sin Técnica y Tecnología,
y éstas son impensables sin la Ciencia.
Señor Presidente:
Juan Manuel Santos.
Excelentísimo Señor: Permítame invocar al Espíritu Santo, para que guíe a Su Señoría a un Proyecto capaz de salvar a Colombia. Para inducir éste milagro, comenzaré con la Carta de Despedida de García Márquez a sus Amigos que dice:
"Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo y me regalara un trozo de vida, posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo. Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan. Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz. Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen. Escucharía cuando los demás hablan y como disfrutaría de un buen helado de chocolate.
Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo me tiraría de bruces al sol, dejando descubierto no solamente mi cuerpo, sino mi alma. Dios mio, si yo tuviera un corazón, escribiría mi odio sobre el hielo, y esperaría a que saliera el sol. Pintaría con un sueño de Van Gogh sobre las estrellas un poema de Benedetti, y una canción de Serrat sería la serenata que le ofrecería a la luna. Regaría con mis lágrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos…
Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida…no dejaría pasar un solo día sin decirle a la gente que quiero, que la quiero. Convencería a cada mujer u hombre que son mis favoritos y viviría enamorado del amor. A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse! A un niño le daría alas, pero le dejaría que el solo aprendiese a volar. A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez, sino con el olvido. Tantas cosas he aprendido de ustedes, los hombres… He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada. He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño, por primera vez, el dedo de su padre lo tiene atrapado por siempre.
Continúa.....
Viene de:
CARTA ABIERTA...
He aprendido que un hombre sólo tiene derecho a mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarle a levantarse"....…
El mensajero de esta misiva, no pide como Gabo "un trozo de vida", sino que implora en sus plegarias al altísimo un ápice de su infinito poder, para exigirle al Espíritu Santo que guíe a Su Excelencia a encontrar un Proyecto capaz de salvar a Colombia. Para comenzar a realizar éste milagro, invito a Su Señoría, a leer, criticar y debatir el blog: www.laultimaoportunidad.com (Los Planos de la Patria Soñada), basado en las recomendaciones del Comité de los Sabios (Ciencia y Tecnología a manos llenas) promulgado en “COLOMBIA AL FILO DE LA OPORTUNIDAD” y ajustado a la Teoría de los Sistemas Auto-organizados.
La citada Propuesta pretende desarrollar al País Científica, Tecnológica, Cultural y Económicamente, en un lapso máximo de 15 años; Esta aseveración está sustentada por el siguiente hecho:
En el año 1.982, el autor publicó en la Revista DOS MUNDOS el artículo: "La Urgencia de una Política Tecnológica" (N° 6, p.p. 19-21, Viena), cuyas ideas centrales son análogas a las descritas en el citado blog. Tailandia, Taiwan, Singapur y Corea, países que en la década del 80 tenían un desarrollo equiparable al colombiano, adoptaron una política nacional similar a la diseñada en dicho artículo, y hoy en día son naciones pujantes que compiten con todas las potencias industrializadas, en todos los mercados del mundo y cada uno tiene un P.I.B. superior a 6 veces al de Colombia. Todo lo anterior demuestra la veracidad de ésta Propuesta. El citado blog también contiene (entre otros artículos) el DECÁLOGO DE LA PAZ: 10 preceptos fundamentales para obtener la paz en Colombia en un término de 3 meses. ¡ Quién lo creyera ?, pero - hay que leerlo para creerlo -.
Sería un ditirambo para el autor si Su Señoría se dignara leer el citado blog.
Con respeto y sentimiento patrio, me suscribo de Usted.
Atentamente:
Benhur Chica Giraldo, M. Sc.
Profesor Jubilado U. N. Colombia.
Véase en Google.-
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