Desde
que se dio inicio al semestre, las estudiantes de la Licenciatura en Filosofía
en la UPN, hemos padecido una odisea de nunca acabarse: la falta de salones
para recibir nuestras clases. Esta problemática no es muy reciente, la
verdad hemos tenido esta dificultad desde hace bastante tiempo atrás. De hecho,
las estudiantes de primer semestre entramos con la enorme duda de la
disponibilidad de salones, pues ya teníamos noción de lo que nos íbamos a
enfrentar y durante el proceso de admisión algunas aspirantes rumoraban que tal
vez íbamos a tener que recibir clases afuera por la falta de éstos.
Pues
bien, los hechos no se hicieron esperar. Si bien, se han dado algunas
soluciones frente a esta problemática, ésta aún sigue siendo muy evidente,
puesto que al iniciar el semestre no se habían asignado salones para más de 10
materias en toda la licenciatura, entre las que se encuentran seminarios y
electivas.
Las
estudiantes de primer semestre no nos salvamos de sufrir semejante odisea, pues
no se nos asignó salón para una materia, la cual empezamos a ver hasta la
cuarta semana después de haber iniciado el semestre precisamente porque no
había ningún salón para recibir la asignatura; para colmo de males, el salón
que se nos había asignado era temporal, debido a esto, todos los miércoles nos
tocaba dirigirnos a la oficina de la licenciatura para averiguar si había o no
salón para poder tener la clase.
Fue así
como el pasado miércoles 18 de septiembre, tuvimos que trasladarnos de un lado
para otro. Primero estuvimos en la Sala Paulo Freire (salón que se nos había
asignado temporalmente para recibir la clase), pero resultaba que allí había
una conferencia, por lo que tuvimos que irnos hasta la oficina de la
licenciatura para que nos solucionara el inconveniente, pasó alrededor de media
hora, y nos dijeron que teníamos que ir hasta IDEAS[1], lugar donde se nos asignó otro salón temporal. Luego, llegamos
a IDEAS y nos encontramos con la sorpresa de que el salón que se nos había
indicado estaba ocupado, por lo que tuvimos que esperar nuevamente para que se
nos diera otro salón. Finalmente, después de hora y quince minutos de espera,
se nos asignó otro salón en ese mismo lugar, salón que ni si quiera daba abasto
para los 35 estudiantes que íbamos a recibir la clase, ese día la incomodidad y
el hacinamiento se hacían más notables. No bastando con lo anterior, se nos
menciona que el salón definitivo se nos asignaría en la sede El Nogal[2] y no en la Sede de la 72 ni en IDEAS. Finalmente y
después de tantas vueltas que dimos, hace poco se nos asignó el salón
definitivo, el cual está ubicado en IDEAS, en donde los salones no están en
óptimas condiciones para una clase de más de 30 personas. Además, es importante
recordar que este lugar ha sido escenario de agresión y señalamiento a varias
estudiantes de la UPN, hechos que se presentaron el semestre pasado.
Sin
duda, la falta de salones en Licenciaturas como Filosofía, no son más que la
viva muestra de las terribles condiciones de hacinamiento que atraviesa la UPN.
Los pocos salones que hay no dan abasto para más de 10.000 estudiantes que a
diario estamos en la Universidad, es más, ya ni si quiera alcanzan los salones
ubicados en lugares diferentes a la Sede de la 72, pues lo que ocurre en
Filosofía, por ejemplo, pone en evidencia este hecho. Fuera de ello, no es de
olvidar, que a raíz del mismo hacinamiento, tampoco hay pupitres para recibir
nuestras clases, por lo que algunas estudiantes hemos tenido que recibir clases
hasta en el piso y con salones totalmente llenos.
Es
claro que las instalaciones de la UPN no dan abasto para más estudiantes. Es
increíble como la nefasta administración de Orozco considera que esta
problemática se soluciona con mesas de billar, o con aumentar los cupos y abrir
tres cursos en programas como Diseño Tecnológico; o peor aún, elevando los
costos de nuestras matrículas para seguir aumentando los cupos.
Evidentemente,
todo lo dicho anteriormente, refleja la grave crisis en la que se encuentra la
UPN, sin desconocer lo ocurrido recientemente en Valmaría, sede clausurada por
las pésimas condiciones de salubridad en las que se encuentra y la crisis
sanitaria que atraviesa también la Sede de la 72, en donde toca hasta hacer
fila para hacer nuestras necesidades fisiológicas por la falta de baños en
algunos edificios, como es el caso del Bloque A, en donde la supuesta
remodelación de los baños parece nunca terminar.
Por
todo ello, podemos concluir que filosofía no es la única Licenciatura que vive
una odisea, sino toda la UPN, pues la crisis de la Universidad, viene siendo
entonces, una odisea que las estudiantes tenemos que vivir a diario en carne
propia.
Grupo
Estudiantil Anarquista (GeA)
[1] IDEAS: Instituto en el que la administración de la UPN
paga arriendo para la utilización de algunos salones para recibir clases. El
lugar está ubicado en la calle 69 con carrera 11.
[2] Sede El Nogal: Sede de la UPN en donde se ubican la
Licenciaturas en Música y Artes Visuales, el lugar está ubicado en la calle 78
con carrera 9.
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