“Las universidades han sido hasta aquí el
refugio secular de los mediocres, la renta de los ignorantes, la hospitalización
segura de los inválidos y - lo que peor aún el lugar en donde todas las formas
de tiranizar y de insensibilizar hallaron la cátedra que las dictara. Las
universidades han llegado a ser así fiel reflejo de estas sociedades decadentes
que se empeñan en ofrecer el triste espectáculo de una inmovilidad senil. Por
eso es que la ciencia frente a estas casas mudas y cerradas, pasa silenciosa o
entra mutilada y grotesca al servicio burocrático. Cuando en un rapto fugaz
abre sus puertas a los altos espíritus es para arrepentirse luego y hacerles
imposible la vida en su recinto. Por eso es que dentro de semejante régimen,
las fuerzas naturales llevan a medio trizar la enseñanza y el ensanchamiento
vital de los organismos universitarios no es el fruto del desarrollo orgánico,
sino el aliento de la periodicidad revolucionaria.”
Manifiesto
Estudiantil de Córdoba, 1918.
Comienza
a cerrarse en la Universidad de Caldas el triste capítulo de la administración
privatizadora y Neo liberal de Ricardo
Gómez al tiempo que se abre una brillante perspectiva de lucha y trabajo por
defender la Universidad pública estatal y al servicio del pueblo. La derrota propinada a la intención de catedratizar la planta docente
por parte de la administración es un hecho que debe alegrarnos y recordarnos
que es la lucha la que nos da lo que la administración y el gobierno nos
quitan, este es un triunfo contundente atribuible exclusivamente a la movilización, a la lucha y la dignidad de
estudiantes y profesores de la Universidad de Caldas que se levantaron contra
esta lesiva medida, debe servirnos esta
lucha, además como primer paso en la
preparación de futuras y decisivas jornadas para la Universidad Colombiana,
como es la disputa que estudiantes, profesores y trabajadores daremos por la
concreción de la ley alternativa de educación superior que viene construyendo
la Mesa Amplia Nacional Estudiantil MANE y que pretende resolver los problemas
estructurales de la educación superior, de las que medidas como esta o el alza
de matrículas son simples expresiones.
Los
estudiantes y profesores de la Universidad de Caldas debemos sentirnos
orgullosos y tranquilos por el contundente triunfo obtenido contra uno de los
proyectos más lesivos que esta administración se haya atrevido a presentar, esta
lucha salvo a la Universidad de Caldas de un desastroso futuro que hubiese
lesionado, de ser aplicado, de forma grave la calidad de la formación, la
investigación y la proyección de nuestra alma mater. Sin embargo ni esta lucha
ni su desenlace feliz pueden entenderse
cabalmente sin comprender la importancia de la Unidad de estudiantes y
profesores como el aspecto que dio a la lucha los niveles de contundencia
precisos para que el Consejo Superior Universitario echase atrás esta nefasta
medida.
Es por
esto y entendiendo que Todas las luchas requieren esfuerzos, sacrificios y
renuncias a fin de alcanzar sus objetivos, pero advirtiendo también que es
responsabilidad de la comunidad universitaria
velar por el cumplimiento de las garantías y acuerdos que posibiliten la
culminación efectiva y en condiciones de calidad del semestre académico que
hacemos dos llamados:
En
primer lugar a los profesores, alma y nervio de esta lucha, a con criterios de
flexibilidad cumplir las garantías otorgadas por el reglamento estudiantil en
su artículo 40, y a propiciar todas las modalidades que garantizando siempre la
calidad en los contenidos, prioricen la
concertación con los estudiantes de los tiempos y formas en que se producirá
el cierre del periodo académico, de manera que este se produzca en medio del
menor traumatismo posible.
En
segundo lugar a los estudiantes a velar por el cumplimiento efectivo de las
garantías y fechas establecidas, pugnar por concertar con docentes y directores
de programa las fechas y tiempos de la culminación del periodo académico y en
el caso de presentarse cualquier
dificultad no dudar en canalizarla a través de la representación estudiantil.
Los
últimos hechos nos dan una importante lección en el sentido de la importancia
de la unidad entre profesores y estudiantes, y del carácter fundamental de la
lucha como detonante de cambios y transformaciones que abren el camino para la
construcción de una nueva educación superior para un país con soberanía,
democracia y paz.
Por los
profesores
Nancy
Cardona Gómez
Representante
Profesoral Consejo Académico
Luz
Elena Sepúlveda
Representante
Profesoral Consejo Académico
Por la representación Estudiantil
Luis
Felipe Marín
Representante
estudiantil al consejo Académico
Activista
FUN-Comisiones MODEP
Darío
Arenas Villegas
Representante
Estudiantil Consejo Superior
Organización
Colombiana de Estudiantes OCE
Alexander
Álvarez Giraldo
Representante
estudiantil al consejo Académico
Organización
Colombiana de Estudiantes OCE
0 comentarios:
Publicar un comentario