En las últimas
semanas se ha hecho visible en la ciudad de Cúcuta, el reclutamiento forzado
por parte del Ejercito Nacional, quienes llegan a los barrios periféricos de la
ciudad, intimidando a los jóvenes que no tienen la libreta militar con subirlos
al camión y llevárselos al batallón. Colombia Informa tuvo acceso a uno de
estos casos ocurrido el día 9 de noviembre del 2012 a las 7:00 de la mañana en
los alrededores del colegio Integrado Juan Atalaya (colija).
El
joven Eleazar Andrés García Pabón que se movilizaba en una buseta en la cual se
dirigía hacia su lugar de trabajo fue abordado por dos soldados del Ejército
Nacional que se encontraban realizando un operativo de reclutamiento para ellos
rutinario, pero ilegal ante la ley dada la sentencia de la Corte Constitucional
(C 879 del 2011). Abordaron al joven y le solicitaron su libreta militar, el
alegó que no tenía, entonces los soldados procedieron a exigirle que se bajara
del bus y se presentara ante el teniente en jefe de la operación Villota Erazo
Roliger, petición que el joven no aceptó, alegando su condición de
desplazamiento y vulnerabilidad ante la ley, agregando además que este
procedimiento era ilegal ya que los oficiales del ejército estaban violando el
debido proceso que se sugieren para estos operativos, a lo que el soldado
solicitó la presencia del teniente ya mencionado anteriormente, este subió a exigirle que se bajara del
vehículo a las buenas o a las malas, orden a la cual el joven no accedió por
los argumentos ya planteados, ante lo cual el Teniente junto a dos soldados más
procedieron a bajarlo del bus a la fuerza ultrajándolo física, psicológica,
económica y moralmente, sujetándolo con violencia y maltratándolo en los brazos
y piernas para hacerlo bajar.
Utilizando
fuerza desmedida hacia el joven, tanto que lograron quitarle el bolso,
posteriormente se lo tiraron al suelo causando el daño a la pantalla de una
tabla Lenovo que pertenece a la entidad en la cual labora.
Luego
prosiguieron con violencia arrastrándolo por la calle hasta tirarlo al camión,
a pesar de que el joven pedía que por favor, lo dejaran comunicarse con su mamá
y que no lo maltrataran más, plegaria que fue respondida por los soldados con
la amenaza de que le iban a robar su celular. De esa manera lo llevaron hasta
el batallón del grupo mecanizado maza No 5, en donde ya con su madre y dos
amigos periodistas a quien les alcanzo a informar lo que sucedía, se dirigieron
con el mayor Rivera a hablar en tono de denuncia por los actos inconcebibles
por parte del teniente y soldados. Este mayor es quien da las órdenes de esos
operativos o “batidas” ante él se hizo la queja por el maltrato hacia el joven
por parte de los ya mencionados agentes, pero solo respondió “que el Teniente
había actuado como tenía que actuar”, es decir, que lo bajaran del bus a las
buenas o las malas.
Luego
de que el joven fue liberado, se prosiguió a hacer una denuncia en la Procuraduría
General de la Nación.Se espera un pronunciamiento de esta instancia y de la
Defensoría del Pueblo, respecto al reclutamiento ilegal y forzado que esta
realizando el Ejército Nacional que en un afán de vincular a mil jóvenes a sus
fuerzas, lleva a cabo casi todos los días dicho procedimiento. Para muchos esta
manera de reclutamiento es normal debido a que no conocen las nuevas
reglamentaciones para realizar dicho proceso.
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