La situación educativa de nuestra ciudad es bastante delicada. Basta señalar algunos pocos casos para evidenciar que en nuestra ciudad cada vez perdemos más el derecho a la educación. De acuerdo a cifras del estudio “Bucaramanga Cómo Vamos – 2011” sólo el 72% de las familias de la ciudad tienen algún grado de satisfacción con la educación. Se ha calculado que alrededor de 70 Hogares de Bienestar Familiar han sido cerrados sólo en Bucaramanga, pues con el cambio de la metodología del Sisbén cientos de niños menores de 5 años se han quedado sin educación pre-escolar pública. Colegios del barrio Villas de San Ignacio y Belencito llevan todo el año con mal servicio de agua o sin éste. 23 Colegios de Floridablanca operan en predios irregulares: algunos se están derrumbando. El hacinamiento en salones de más de cuarenta jóvenes, el autoritarismo, la carencia de materiales y el recorte de personal docente se han tomado los centros educativos de nuestra ciudad.
La educación es un problema de toda la nación y le corresponde a toda la sociedad definir qué quiere que pase con ella. El país aplaude a sus jóvenes universitarios que defendieron el año anterior la educación y tiene esperanzas puestas en esta generación de líderes. Hoy que construyen una Nueva Ley de Educación, sabemos de las dificultades y esfuerzos, también de la mala actuación del gobierno nacional, que ha venido opacando los debates públicos y disminuyendo cualquier posibilidad de hacer una Ley con participación y a la altura de los problemas del país. No puede ser posible seguir con una educación que le dé la espalda a problemas graves de nuestra sociedad, como la guerra, la depredación del medio ambiente, la aberrante corrupción, la crisis en la salud... Nuestros jóvenes tienen derecho a la educación con todas las garantías, y a que ésta no sea simplemente una fábrica de obreros baratos o de destructores de la vida.
Desde el Congreso de los Pueblos hemos venido impulsando el Congreso Educativo, porque se sabe que la educación es función de las comunidades, y porque no basta cambiar la Educación Superior si desconocemos la situación de la Educación Media, Primaria y Pre-Escolar. Dada la compleja situación social y política de nuestro país, de importantes retos, de serias amenazas para la vida, nos merecemos un nuevo Sistema Educativo. El sólo hecho – de sobra absurdo – de que la única Universidad Pública del departamento de Santander atraviese la penosa manipulación de grupúsculos de élite a su interior, es prueba suficiente de la necesidad de luchar, como lo dicen los estudiantes de la UIS, por la ética, la democracia y la autonomía.
Las comunidades de nuestros campos y ciudades tienen las esperanzas puestas en que sus estudiantes se den la pelea por la educación de cara al país, para que como jóvenes asuman el reto de ser esa generación que ayude a liderar la construcción del país que todas y todos nos merecemos. La nación y los pueblos cuentan con ustedes ya que solos no podemos.
Nos despedimos con nuestro más fuerte abrazo y admiración, los mejores deseos para el V Plenario, y con la expectativa de intercambiar puntos de vista sobre la educación y participar de las movilizaciones programadas para estos días.
Congreso de los Pueblos – Impulso Área Metropolitana de Bucaramanga
7 de septiembre de 2012
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