Compañera, compañero. El ambiente oscuro, intimidante, de vigilancia y control al estilo “Gran Hermano”, es algo que sólo podemos desafiar y finalmente vencer, si nos organizamos y asumimos una actitud de resistencia.
Martes 26 de julio.
Ante la actual arremetida de vigilancia, control y represión a la cual vienen siendo sometidos los estudiantes, trabajadores y profesores de la Universidad Industrial de Santander y considerando que no se trata de una situación meramente coyuntural, se tomó la decisión de trabajar por llevar a cabo una Asamblea General de estudiantes, espacio donde las bases estudiantiles confluyeran para hacer denuncias, propuestas y así mismo tomar determinaciones en conjunto respecto a todas las medidas de control que entraron en vigor con el re inicio de clases.
La Asamblea tuvo por objetivo la discusión acerca de la situación de la puesta en marcha de todo un paquete de medidas de represión, las que incluyen la insultante militarización de la Universidad en la que más de cien miembros de la fuerza represiva de la policía ocupan el ingreso de la Universidad, así como un número no definido de agentes infiltrados del Estado, abiertamente reconocidos por el Ministro de Defensa. Esta militarización va de la mano con la instalación de cámaras de vigilancia de alta tecnología –y costo–, así como la obligatoriedad de presentar el carné de miembro de la Universidad a todos quienes hagan parte de la comunidad, medidas que atacan de raíz la esencia histórica de la Universidad como un espacio de desarrollo de lucha de ideas, dentro de las cuales pueden y debe estar aquellas que cuestionan de fondo el injusto orden social actual.
Siendo las ocho y media de la mañana del martes 26 de Julio, en la plazoleta ubicada frente a Biblioteca central, las intervenciones iniciaron haciendo denuncia pública de los entrenamientos militares que se estaban llevando a cabo dentro y fuera de la Universidad el pasado domingo 24 de Julio. Por otra parte, haciendo un cuestionamiento directo al estatuto de la Universidad donde en palabras textuales “se propende un ambiente de respeto y crítica” se denunció el ambiente represivo y hostil al cual nos enfrentamos los estudiantes con el simple hecho de entrar y salir de la Universidad. Se recalcó en varias de las intervenciones también, que esos personajes que el jueves nos esperaron “vestidos de blanco” atacaron y agredieron física y verbalmente estudiantes que se rehusaron a mostrar el carné en la entrada. Los hechos del jueves 21 de Julio, que resultaron con varios estudiantes heridos por artefactos explosivos lanzados por la policía –uno de los estudiantes tuvo que ser remitido a la clínica por que se le incrustaron balas de goma en su cuerpo– y no por parte de los estudiantes como los medios lo quisieron hacer ver, y un estudiante detenido e injustamente judicializado tras las mentiras de la policía y los medios, dejan atrás esa “cara amable” y demuestran el verdadero carácter que tienen estos individuos como defensores de los intereses del estado, de la actual para-administración y su naturaleza al servicio de las clase dominantes.
Un aparte importante en las intervenciones fue la discusión presentada sobre los hechos ocurridos el pasado 15 de Junio. Por una parte algunos compañeros decían sentirse indignados y llamaban a rechazar los hechos que afectaron una parte de la Universidad. Por otro lado, el mensaje más fuerte y contundente que se recogió fue que estos hechos en realidad sirvieron como excusa –y no son la causa– para instaurar estas medidas represivas que hoy deben combatirse. Parte de un edificio quemado, el robo de aparatos electrónicos etc. ¿son acaso comparables con la vida de los estudiantes y profesores que en el 2007 figuraban en listas para ser ejecutados por medio un denominado “Plan Pistola”? O como mencionaba un compañero en una intervención, ¿son acaso esos tan renombrados 3000 millones en pérdidas para la Universidad su mayor déficit cuando invierten 800 millones de pesos en cercarla con un muro y alambre de púas, al mejor estilo de una cárcel, o cuando la suma del contrato por solo 9 meses en vigilancia privada asciende a 1500 millones? Todo esto, sin conocer siquiera la suma de dinero “invertida” en la instalación de cámaras (visibles y no) por toda la Universidad
Todo hace parte de un plan represivo que no solamente se ve en la Universidad Industrial de Santander. Ya los compañeros de la Universidad de Antioquia llevan un año comprometidos con la lucha en pro de sacar a la fuerza represiva de la Universidad, entre otros muchos. De este plan hace parte la persecución de profesores y estudiantes, por medio de expulsiones y amenazas, así como la instalación de cámaras mucho antes del 15 de junio. Hay que tener claro sin embargo, que la conciencia no debe crearse en torno a la coyuntura que en el momento acontece. Es primordial elevar las miras a la ciudad, al país, al mundo entero. No solo en la universidad se están viendo las medidas de la denominada “seguridad ciudadana”, los barrios cada vez más infestados de “para-vigilancia”, cámaras en cada esquina, la desinformación de los medios masivos de comunicación que solo sirven para dividir y segregar al pueblo, al estudiantado. Como así mismo, deslegitimar las medidas legales y los mecanismos que ellos quieran imponer. No es en vano que a un llamado para acompañar una reunión el 27 de Julio en la Gobernación, el estudiantado presente en la asamblea haya ignorado. La movilización del estudiantado (expresada en varias intervenciones y propuestas), debe ser a la calle, a los barrios. La Universidad pertenece al pueblo y a él nos debemos, los profesionales que aquí se forman deben ser conscientes que hay una relación entre esta batalla que hoy estamos dispuestos a dar y una construcción de un mundo, de una sociedad diferente.
Las posiciones en las intervenciones aunque variadas, apuntaban al trabajo por la construcción de un movimiento estudiantil organizado, que lucha y se afirma en contra de cualquier medida represiva que afecte tanto al estudiante como a las masas en general. El llamado en general es a dejar la pasividad de lado, rechazar todas las medidas que coarten la libertad de pensamiento, de disentimiento, de crítica. A construir un verdadero movimiento estudiantil que represente los intereses del pueblo, sea científico y busque la verdad.
PROPUESTAS
1. Pupitrazo en la entrada de la Universidad (Acto efectuado al culminar la Asamblea el martes 26 de Julio)
2. Cartel gigante con la exigencia: “Fuera policía de la UIS”
3. Hacer una movilización interna por la Universidad y entrar a los salones que se encuentren en clase, plantear la problemática y generar discusión.
4. Entrar a la biblioteca sin presentar carné.
5. Mitin en la entrada todos los días a las 8:00 am y a las 2:00 pm promoviendo no mostrar el carné para ingresar a la Universidad.
6. Hacer una consulta popular dentro de la Universidad. Recoger firmas.
7. Reunión de los centro de estudios para generar debate, crítica y conciencia.
8. Hacer carnés de papel en donde en vez de la foto se pongan fotos de obreros, indígenas, líderes revolucionaros etc. Para presentar a la entrada.
9. Hacer una “serenata” en la entrada de la Universidad que sea llevada a cabo por compañeros que no sepan tocar instrumentos, y que produzca un sonido desagradable, y que sea parte del rechazo a la militarización de la Universidad.
10. Buscar la forma de implementar una mesa de trabajo de Derechos Humanos. Hacer un llamado a la corte penal internacional para socializar la problemática.
11. Disfrazarnos de presos (camisetas blancas con rayas negras) para entrar. Así mismo, dados hechos de discriminación presentados por la forma de vestir de los compañeros –una celadora, en un acto del más brutal fascismo impidió la entrada a un compañero con el elitista argumento de que venía mal vestido– implementar el día del “Mal Vestido”.
12. Huelga General. Con un nivel de concientización amplio, se propuso hacer una jornada de no hacer actividades académicas en la universidad hasta que la fuerza policial y militar esté fuera.
13. Movilización del estudiantado en general a las masas. Marchas cuyo trayecto deje de ser la gobernación. En cambio pasar por los barrios, las plazas de mercado, calles concurridas etc.
14. Elaboración de pre-grabados por parte de los estudiantes, en los que se denuncie la situación de represión que se está viviendo. Estos videos serían enviados a los medios comunitarios de comunicación de las provincias y de los barrios. Los representantes de estudiantes en las sedes podrían hacer el llamado en sus provincias, para que los pobladores vean los videos.
15. Creación de comités de trabajo por facultad. Esto se llevó a cabo el martes tras la culminación del pupitrazo. La organización fue por facultades. Se denominaron Comités de Resistencia por Facultad. Cada facultad se reunió y se trazó diferentes objetivos y se concertaron diferentes propuestas.
16. Recopilar en un documento las propuestas y la relatoría de la asamblea realizada el martes 26 de Julio.
Compañera, compañero. El ambiente oscuro, intimidante, de vigilancia y control al estilo “Gran Hermano”, es algo que sólo podemos desafiar y finalmente vencer, si nos organizamos y asumimos una actitud de resistencia. Los Comités de Resistencia por Facultad ya echaron a andar, y pintan enérgicos y con un bello ímpetu, no te quedes por fuera, te esperamos con tu inconformismo, ideas y creatividad… Sin exageración, ni hipérbole, este es un momento que la historia juzgará a esta generación como la que permitió la inundación de la Universidad en el fango del oscurantismo y el miedo, o como la que la defendió y entregó a las nuevas generaciones una Universidad vibrante, abierta y revolucionaria.
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