NACIÓN
Estudiantes de la universidad rechazan el ingreso del Esmad al campus universitario y la instalación de cámaras de vigilancia dentro de la institución. El campus fue desalojado.
Las autoridades de la Universidad Nacional autorizaron el ingreso de la fuerza pública a las instalaciones de la institución ante la gravedad de los disturbios, que comenzaron la mañana de este jueves.
Cerca de 50 miembros del Esmad hacen presencia en la Plaza Central de la Institución, según informó la universidad.
La Vicerrectoría Académica de la Universidad Nacional ordenó el desalojo del campus de la institución ante el desorden protagonizado por personas encapuchadas que destruyeron algunas cámaras de seguridad.
La situación se conoció a través de Twitter. Estudiantes denunciaron la presencia de estas personas.
"Los capuchos destruyen cámaras de vigilancia en la Universidad Nacional", "se metieron los capuchos a dañar el 310" y "orden de desalojo en universidad nacional, aprox. 200 capuchos", son algunos de los trinos publicados.
Estudiantes rechazan ingreso del Esmad
La presencia de miembros de la fuerza pública en el campus universitario generó el rechazo de los estudiantes.
“La última vez que pasó, capturaron a los que no tenían que ver con el tema. Para nosotros es complicado que esto (el ingreso de la fuerza pública) se vea legítimo cuando no lo es. (...) Hay una doble moral, incluida la de los medios, que ven la violencia dentro campus como terrorismo, pero la que viene de afuera como democracia, y no estamos de acuerdo con eso”, aseguró a Semana.com Jairo Rivera, representante de los estudiantes ante el Consejo Superior.
Se desconoce si los disturbios de este jueves están relacionados con la reforma de la Ley 30 de educación superior. Sin embargo, según Rivera, uno de los motivos del descontento de los estudiantes son las cámaras de seguridad que la universidad instaló en las instalaciones.
“La mayoría rechaza las cámaras dentro del campus, porque no se ponen para mejorar la seguridad, sino para controlar las manifestaciones de los estudiantes, de cualquier tipo: violenta y no violenta”, explicó el representante universitario.
Rivera agregó que en varias oportunidades han solicitado el retiro de las cámaras de seguridad. “Pedimos que haya una construcción del campus universitario a partir del mismo campus. Las cámaras cuestan dinero y la universidad dice que no tiene plata, pero sí la tiene para controlar a los estudiantes”, dijo.
Por ahora se desconoce la magnitud de los daños y el costo de los mismos. La movilidad sobre la calle 26 y la carrera 30 se afectó por los disturbios protagonizados por los encapuchados que sostienen enfrentamientos con miembros del Esmad.
Las estaciones de Transmilenio de la Universidad Nacional han retomado el servicio que estuvo suspendido por varias horas.
Desde hace dos semanas, el centro educativo ha sido protagonista de la continua alteración del orden público.
El Gobierno y la comunidad académica han rechazado los actos vandálicos. "Hay que distinguir lo que es una protesta estudiantil, de un tropel. La capucha y la piedra no pueden ser la expresión de una protesta estudiantil", afirmó sobre el tema el vicepresidente Angelino Garzón en días pasados.
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